Dentro
del continuo deterioro de la educación pública, lo que más inciden en los
recortes del PP es en el precio, el coste de la educación, que no para de subir
para los ciudadanos, y no como consecuencia de pagar menos como contribuyentes
en proporción a lo que tienen, sino por un cambio de asignación de esa
financiación a otras partidas presupuestarias, como el pago de deuda y más
deuda ilegítima, defensa, iglesia, ayudas a la banca, subvenciones a empresas,
etc.
Las becas en la educación era el instrumento que se lleva aplicando desde
hace años para posibilitar que cada vez más gente(en el contexto de un país que
lastra decenios de educación elitizada para las clases altas) pueda acceder a
una educación completa y que desarrolle sus aptitudes elegida por cada uno o
una.
Estudiar
tiene un coste directo muy alto, y la beca ha sido el único camino para
estudiar de muchas personas en los últimos años. Además, como el alquiler de
piso si se vive lejos, compra de material, de consumo habitual, de
transporte(tanto urbano como a larga distancia), se añaden como gastos
complementarios, más otros que pueden surgir(no a todos) de la estresada vida
estudiantil y del ocio juvenil que también es importante.
Ha
cambiado mucho la beca en estos años, siendo lo más influyente el decreto de
becas de este verano de 2013, que introduce rebajas de conceptos en la beca y
introduce la parte variable, que detallaré a continuación. Pero hay otros
cambios en la beca más invisibles, tanto cuantitativos en el dinero otorgado
como cualitativos.
Quienes estudiaban una licenciatura o
diplomatura el año pasado, podían acceder, según el umbral, a 2550€ de parte
compensatoria(umbral 1), 244€ de material(u.3), 150€ de rendimiento académico(u.5),
2556€ de residencia(u.4), 185€ de transporte urbano(incompatible con
compensatoria, u.3) , hasta 937€ de desplazamiento(esta incompatible con
transporte urbano y residencia, u.3) y la exención del pago de matrícula(u.5). Para
el máster, las cantidades eran las mismas. En cuanto al grado, igual salvo que
la parte compensatoria se sustituía por la parte de beca salario, de 3500€ de
cuantía.
Este año, este sistema ha desaparecido por
completo, reduciéndose a 3 los umbrales y dejando en 4 los conceptos de ayudas,
eliminando los demás(como material y desplazamiento). Queda la parte de beca
salario de 1500€(u.1), la parte de residencia(u.2), la beca básica de 200€(incompatible
si se obtiene la beca salario) y la parte variable(u.2), mientras que la
exención de matrícula es hasta umbral 3 y la nota necesaria para obtenerla es menor,
5,5 frente al 6,5 de los demás conceptos.
La parte variable queda como incógnita, a
pesar de que estamos en septiembre y ya se esté cerrando el plazo de solicitud
de beca. No se sabe cuánto va hacia cada estudiante, pero las previsiones no
son muy esperanzadoras. Wert dijo que subiría el presupuesto en becas a 1.400
millones€ frente a los 1.250 millones€ del año anterior, pero es una cifra no
consignada en los presupuestos generales y eso significa que solo es una aproximación
y todo dependerá de la situación universitaria de estudiantes en general y el
presupuesto manejado por el Estado en educación.
Partir de esta cantidad es importante para
determinar la parte variable, pues ésta será lo que quede del reparto a los
becarios de las partes del salario, residencia, renta básica y exención de
matrícula. Una vez repartido, lo que sobra del presupuesto realmente
asignado(que no es ese, no se sabrá hasta que se decida en las cuentas del
Ministerio), se otorgará en escala según los becarios de umbral 2 o inferior de
renta que hayan, y entre ellos, según su nota académica y su renta, en una
extraña fórmula que aún no he sido capaz de descifrar:
Por tanto, una importante cantidad de lo no
otorgado anteriormente(fuera de la variable, lo máximo a lo que se opta son
3060€ de beca, frente a los fijos en umbral 1 de unos 5000€(6000€ en grado) del
anterior sistema), será supuestamente para la parte variable, que con la subida
de tasas, queda en una cantidad inferior. Este sistema, por tanto, en teoría
obligaría a repartir más de lo debido ya que la parte fija del otro tenía ese
límite pese a que sobrara presupuesto. Está claro que no, y que difícilmente se
lleguen a esos 6000€ en algunos casos, y que si se llega, será por tener un 9
de media y no por sufrir los inconvenientes de una renta familiar de miseria.
Con este sistema, claramente los estudiantes
con beca perderán dinero de forma directa, pero, ¿y indirecta?. Pues ya se
llevan años perdiendo dinero así, por eso el título del artículo. La subida del
IPC, al contrario que la subida de tasas universitarias, no tiene reflejo en la
subida de cuantía de las becas, así que, contando desde 2008(cuando cambió el sistema
de becas al de los últimos años), la subida del IPC ha sido del 8,4%, cuando
las becas son como una pensión más, ya que se utiliza para los gastos más
básicos si se carece de renta. A fecha de hoy, por tanto, con una beca de 5000€
se han perdido comparado con 2008 420€ y con una de 6000€ unos 500€. Todo esto
sabiendo que productos también consumidos por estudiantes, como la luz, el
agua, la comida más elemental y el transporte han subido más de un 8,4%, junto
con la subida del IVA que estaba en 2008 al 16%, es un poco más de esos
aumentos aproximados.
Se estudia más(más horas, horarios más
rígidos, más trabajos) con menos. Quizás esto no sea lo más importante(creo que
no), ante los altos requisitos en las notas que impiden a muchos estudiantes
estar en la universidad más por dinero que por capacidad. Pero es un aspecto
poco comentado y es importante que es otro problema más, lo insuficiente que a
veces es también tener una beca para estudiar en las condiciones óptimas. Con
el anterior sistema, era posible, con el nuevo, estar por ver cómo afecta la
parte variable, si se generaliza o solo es para unos pocos estudiantes.